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28 de septiembre de 2022

Día Internacional del Acceso Universal a la Información

Por: Laura González – Investigadora del Departamento de Derecho de las Telecomunicaciones

Hoy, 28 de septiembre, se conmemora el Día Internacional del Acceso Universal a la Información.

Este día se celebra anualmente, desde 2015, con el fin de reflexionar en torno al derecho humano a buscar, recibir y difundir información y su importancia para el desarrollo de sociedades pacíficas, inclusivas y sostenibles.

Esta fecha fue declarada el 17 de noviembre de 2015 por la Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) y, en 2019, fue proclamada por la 74ª Asamblea General de las Naciones Unidas.

El Derecho al Acceso a la Información es un componente clave del derecho a la libertad de pensamiento y expresión. Hace referencia a la prerrogativa que tiene toda persona de buscar y recibir información en poder de órganos, entes y empresas públicas, exceptuando casos en que la información sea calificada como secreto de estado o de acceso restringido por la Constitución y/o por alguna ley. Este es un derecho fundamental para el desarrollo pleno de una sociedad democrática y transparente, y un ejercicio vital para la rendición de cuentas de las autoridades. 

Este año, se celebrará la ceremonia de conmemoración de esta fecha en Tashkent (Uzbekistán). En este acto, se buscará hacer énfasis en la importancia de la aplicación de los marcos jurídicos de acceso a la información y se subrayará la necesidad de tomar medidas para establecer sociedades del conocimiento resilientes e integradoras. Además, se debatirá el rol que tienen la inteligencia artificial y gobernanza electrónica para lograr el acceso a la información.

Esto último puesto que estos asuntos pueden tener un papel fundamental para mejorar el acceso a la información. Sin embargo, estos avances también plantean desafíos para otros derechos fundamentales (por ejemplo, en términos de accesibilidad e igualdad) y en relación con el uso ético de la inteligencia artificial y la gobernanza electrónica por parte de las instituciones públicas.

Así pues, será interesante ver cómo expertos analizan este tema para lograr que estas herramientas se conviertan en catalizadores e instrumentos para la materialización del derecho a la información, sin dejar de lado los demás derechos fundamentales ni la necesidad de una implementación ética de estas tecnologías.

Fuentes: